miércoles, 10 de marzo de 2021

Material Tú Eres Misión "Cuaresma. El ayuno"

Parece que la normalidad está más cerca. ¡Qué gran noticia! Mejoran las estadísticas en la Diócesis, abren los bares y limitan las restricciones. Nos reencontramos con amigos y familiares. Es tiempo de alegrarse y celebrar.

¿O no?


“Ahora que podemos abrir la boca tal vez tengamos que cerrarla un poco”.

 

Estamos en Cuaresma y nos preparamos para la gran fiesta, la Pascua. Es tiempo de estar alegres por todo lo que avanzamos, pero también de volver nuestra mirada a Dios. Y Dios se encuentra entre aquellos que sufren, entre quienes siguen experimentando los peores efectos de esta pandemia.

Sabemos, por lo que los misioneros nos cuentan, que en muchos lugares del mundo, la pandemia del coronavirus no ha hecho sino agravar la difícil situación en la que ya vivían, con los limitadísimos recursos sanitarios, que se ven desbordados para hacer frente, no solo a la Covid-19, sino a todas las innumerables enfermedades que de normal ya asolan estos territorios; impidiendo el desarrollo sociocultural con la paralización de los miles de proyectos que llevan a cabo; agudizando los problemas laborales y, por ende, el hambre…

¿Y esto qué tiene que ver conmigo?

Esta Cuaresma, el ayuno es y debe de ser una de las expresiones y condiciones de nuestra conversión. Una conversión a Cristo y, como Él mismo hace, una conversión para unirnos a nuestros hermanos que no tienen qué comer, que viven en un ayuno forzoso. Para que, por aquellos que pasan hambre, todos experimentemos la urgencia y necesidad del hambre y la sed de Dios.


“Este año yo ayuno por los que se ven obligados a ello todo el año”


Pero hay algo más…

Aquí también hemos sufrimos los efectos de la pandemia, a muchos niveles y de manera diferente en cada caso. Pero hay algo que parece común. Tanto tiempo viviendo en este estado de alarma decretado por el gobierno, con sus restricciones y limitaciones; las controversias sociopolíticas; la incertidumbre del futuro próximo… parece que nos ha hecho “estar en alarma” para saltar casi por cualquier cosa. Que estamos más irascibles resulta evidente.

El Papa Francisco nos pide para esta Cuaresma ayunar de aquello que estorba para abrir el corazón. Es ayuno de liberación de aquello que nos impide acoger a Cristo y mirar más allá de los problemas, y normalmente de nuestros problemas. La negatividad imperante, las críticas destructivas, las palabras que hieren, incluso la saturación de informaciones.

¿Qué me aporta todo esto? ¿Abre mi corazón a Cristo o lo embota?

Ayuna también de todo esto, por nuestras hermanas y hermanos que no tienen voz o no nos hacemos eco de su gran necesidad, para encontrarnos con ellos en Cristo.


“Tú, en cambio, cuando ayunes, perfúmate la cabeza y lávate la cara, para que tu ayuno lo note, no los hombres, sino tu Padre, que está en lo escondido; y tu Padre, que ve en lo escondido, te recompensará.” (Mt 6, 17-18)


Puedes ahora dedicar unos minutos a meditar estas palabras del Papa Francisco. También puedes entablar un diálogo íntimo con Dios para que te acompañe y ayude en este propósito de privación cuaresmal, para que el hambre y la sed en el mundo sean solo de Cristo. Tal vez la canción que aquí te presentamos pueda acompañarte en este momento de oración.


 

 “El ayuno vivido como experiencia de privación, para quienes lo viven con sencillez de corazón lleva a descubrir de nuevo el don de Dios y a comprender nuestra realidad de criaturas que, a su imagen y semejanza, encuentran en Él su cumplimiento. Haciendo la experiencia de una pobreza aceptada, quien ayuna se hace pobre con los pobres y “acumula” la riqueza del amor recibido y compartido. Así entendido y puesto en práctica, el ayuno contribuye a amar a Dios y al prójimo en cuanto, como nos enseña santo Tomás de Aquino, el amor es un movimiento que centra la atención en el otro considerándolo como uno consigo mismo”.

Y, tú ¿de qué ayunas esta Cuaresma?  Únete y comparte tu propósito en redes con @valenciamision utilizando el hastag #AyunoporlasMisiones y #Ayunode… más aquello que consideres de que debes ayunar. Por ejemplo #AyunodeMentiras o #AyunodePeleas