El Papa Francisco se ha unido al dolor de las familias por la muerte
de al menos 77 personas y los más de 125 heridos al descarrilar en Santiago de
Compostela un tren con 220 pasajeros que cubría la línea Madrid-Ferrol, informó
el portavoz vaticano, Federico Lombardi.
El
Papa Francisco fue informado del accidente y expresó su tristeza, señaló
Lombardi, que pidió a los periodistas acreditados para la XXVIII Jornada Mundial
de la Juventud que se celebra en Río de Janeiro un minuto de silencio por las
víctimas.
El
Pontífice reza por las víctimas, agregó Lombardi, que señaló que el accidente se
ha producido en la vigilia de la festividad del apóstol Santiago y que
posiblemente entre los muertos pueda encontrarse algún peregrino que iba a
Compostela.
Por
su parte, el arzobispo de Santiago de Compostela, Mons. Julián Barrio, en
declaraciones a la cadena Cope, compartía “la gran consternación y el profundo
dolor que ha supuesto este gravísimo accidente ferroviario en el que han perdido
la vida 77 personas. Rezamos por ellas para que el Señor las haya acogido en su
bondadosa misericordia. Yo he pensado esta noche que el Apóstol Santiago les
habrá acompañado al Pórtico de la Gloria.
Pedimos,
movidos por la fe, para que los heridos se vayan recuperando y, por supuesto,
tenemos muy presentes la aflicción y el dolor de las familias para que el Señor
les conceda esa serenidad, esa paz y ese consuelo que, sin duda alguna,
necesitan.
Hoy
de manera especial nosotros celebraremos la festividad del Apóstol, pero
esperamos poder tener una celebración propia y específica por las víctimas de
este accidente ferroviario”.OMPRESS-BRASIL.