Como cada año, en el primer domingo del mes de marzo, el día 7, la Iglesia española se alegra al celebrar el Día de Hispanoamérica, una oportunidad para recordar los lazos misioneros que unen al continente americano y a España, y a los misioneros que allí viven su misión.
Esta jornada está especialmente dedicada a los sacerdotes misioneros Fidei Donum – a aquellos que impulsó a “salir” la encíclica del Papa Pío XII “Fidei Donum” – en América latina, en su mayor parte encuadrados en la OCSHA, la Obra de Cooperación Sacerdotal Hispanoamericana. Actualmente, hay 178 sacerdotes de la OCSHA en América Latina.
Así este próximo 7 de marzo se celebrará el Día de Hispanoamérica bajo el lema “Con María, unidos en la Tribulación”. Como explican desde la Comisión Episcopal de Misiones de la Conferencia Episcopal, la pandemia del covid-19 ha provocado un gran dolor en todo el mundo. De una forma u otra todos los países se han visto influidos por la situación no solo sanitaria, sino también social y económica. En los países hermanos de Latinoamérica se ha vivido con mucha crudeza, porque al mal de la enfermedad se ha unido la falta real de recursos para salir adelante. Los medios de comunicación se han hecho eco de muchas situaciones de verdadero dolor.
Por eso este año, en esta Jornada dedicada a los misioneros españoles que están en Hispanoamérica, se ha querido expresar la cercanía a ellos, porque solo unidos se saldrá de esta situación, y poner todo bajo el manto de María, madre que sufre con los que sufren.
Los pueblos y barrios, tanto en España como en Latinoamérica están sembrados de ermitas, capillas e iglesias dedicadas a ella. María es la madre que reúne a los hijos dispersos, ella es la que guarda bajo su mirada amorosa a los que acuden a ella con humildad y sencillez. La fe, además de la lengua, une a todos los países latinoamericanos y España, y de un modo concreto y fuerte, también el amor a la Madre de Dios.