El acto ha estado encabezado por el delegado diocesano de Misiones del Arzobispado de Valencia, Arturo Javier García, quien ha presentado la campaña de la Jornada Mundial de las Misiones (DOMUND) de 2018, que tendrá lugar el próximo domingo, 21 de octubre, con el lema “Cambia el mundo”. En la rueda de prensa se han ofrecido los datos de la campaña y de la realidad de las misiones. Se ha hablado pues, de los más de 12000 misioneros españoles, y más concretamente, los 225 misioneros valencianos, tanto sacerdotes y religiosos y religiosas , como laicos. Asimismo, se han recogido algunos datos como el total recaudado por la archidiócesis de Valencia en la campaña del DOMUND de 2017 para las Obras Misionales Pontificias, con más de 700.000 euros, el 70 por ciento recogido por parroquias, secundado por donativos particulares y los colegios.
El delegado también nos remarcaba la importancia de los laicos, pues todos somos misioneros. Debemos, siguiendo el lema de la campaña de este año, cambiar el mundo. Y cada uno lo puede hacer desde su realidad cotidiana. Sin embargo, ello no descuida la importancia de sostener a los misioneros en los territorios de misión primero con la oración, pidiendo por la respuesta a tantas vocaciones a las que el Señor llama y a través de los medios económicos. Solo así, los misioneros podrán seguir llevando la presencia de Jesús al mundo entero. Afirma Arturo "Con poquito dinero se pueden generar grandes frutos" y recuerda que la campaña del Domund es la campaña más importante para los católicos.
En la rueda de prensa también ha participado Joaquín Sánchez, misionero comboniano durante 34 años en Brasil y en los últimos 16 años de misión, presente en una diócesis rural de 1.8 millones de habitantes para tan solo 33 sacerdotes; y Sergio Cánovas, joven valenciano que ha participado en la iniciativa de la Delegación Diocesana de Misiones “Verano en misión”, colaborando con misioneros valencianos en Perú.
La intervención de Joaquín Sánchez contenía un mensaje muy rico debido a su dilatada experiencia. Nos hablaba de la importancia del misionero para enseñar a Jesús como las mismas personas, afirma, les pedían. Llevaron a cabo numerosas acciones en pro de la educación, la sanidad... pero recalca aquella en la que potenciaba al laicado para ayudarles en las tareas de pastoral. A estos, los obispos instaban a formarlos en una espiritualidad cuya base fueran los sacramentos y el Evangelio. Creaban así Ministros de la Palabra y encargados de diversas pastorales parroquiales, remarcando la importancia de los Círculos Bíublicos que, considera, podrían exportarse aquí. Recalca pues la labor de los laicos en el mundo actual, principalmente de los jóvenes, esperanza de la Iglesia y del Mundo, coincidiendo con el Sínodo de Obispos que ahora está teniendo lugar.
En la intervención de Sergio Cánovas, el joven recordaba su experiencia en el Colegio Santo Tomás de Valencia, fundado por el misionero valenciano Vicent Font, donde ha explicado que su mundo cambió, a través del amor recibido por aquellas personas que, en realidad, era el amor del mismo Cristo sufriente. Ahora está convencido de la importancia de transmitir a otros jóvenes la importancia de responder a la llamada del Señor a la misión, sea cual sea esta, y de apoyar la labor de los misioneros para acercar a Dios a todo el mundo y transformar sus vidas.
