En un contexto global agravado por la pandemia del Coronavirus, no faltan noticias positivas en la isla de Flores. De hecho, en los próximos meses están previstas nuevas ordenaciones sacerdotales, que se sumarán a las 20 recientes de los Misioneros Verbitas, 3 del Instituto de los Padres Vocacionistas y 1 Stimmatino”, escribe a la Agencia Fides el padre Luigi Galvani, misionero Camilo presente en la isla desde hace más de 10 años. En Flores hay numerosas vocaciones sacerdotales y religiosas, “son muchos los Institutos masculinos y femeninos que han establecido sus seminarios y casas religiosas. Tenemos el mayor seminario filosófico y teológico de la Iglesia católica en el mundo de los Misioneros Verbitas con más de mil doscientos alumnos y que el Papa Juan Pablo II visitó en 1989”, recuerda el p. Galvani.
El Camilo explica que en Flores el Coronavirus ha tiene una presencia limitada hasta el momento pero que, sin embargo, las dificultades no faltan: “La isla de Flores – señala - está considerada entre las más pobres de Indonesia pero tiene la característica de tener más alto porcentaje de católicos (70%) de las 17 mil islas del gran archipiélago indonesio. La población aquí necesita de todo, alimentos, atención médica y necesidades básicas. Cada mes distribuimos paquetes de comida a unas 200 familias especialmente desamparadas. Además, siempre cuidamos con pasión la construcción de casas sobre todo para pacientes con problemas mentales rescatados de años de marginación en situaciones de mala higiene y pobreza. Ya hemos realizado unas cincuenta, dando nueva alegría y esperanza a muchos pobres enfermos”
Agencia Fides