La Hna Ana Botella Sancho nos cuenta cómo fue.
El pasado domingo día 17, D. Arturo Javier García, delegado
episcopal de Misiones y Cooperación, presidió las Vísperas que se celebraron en
el Monasterio de la Purísima Concepción, San José y Beata Inés de Benigánim, de
las Agustinas Descalzas de San Juan de Ribera.
Fue una oración para rogar por los misioneros-as que,
dejándolo todo, marchan a lugares lejanos, ofreciéndose en cuerpo y alma, y
encontrándose con muchas dificultades y
precariedades, se dedican con amor y con tesón a trabajar por el Reino de Dios,
gastando su vida en bien de los demás.
Estuvo acompañado de
dos seminaristas: Jorge y Juan. Este último contó la experiencia que ha vivido en
el verano, junto a cinco seminaristas
más y el propio D. Arturo, en Ecuador.
Él iba con la idea de
ayudar, colaborar, dar su tiempo, “darse”…, y ha descubierto que es mucho más
lo que ha recibido.
“Es sorprendente ver la acogida que te dan, cómo se
desprenden por compartir lo poco que tienen; ese plato de arroz con el que te
obsequiaban allá donde ibas…”.
Nos hizo partícipe de
que el próximo día 30 será ordenado Diácono, junto a otros.
Roguemos por él y por todos, para que el Señor que inició su
obra, la lleve a feliz término; y no
olvidemos a los Misioneros para que no les falte la fortaleza y el ánimo
necesario para cumplir con acierto la misión encomendada, así como para que
surjan nuevas vocaciones.